sábado, julio 31, 2004

Fragmento de "Territorio de Lluvia"

De otro de los poemarios sobre los que trabajo, este fragmento. Sirvan los días tristes para explicar tantas cosas. Habrá noticias pronto, muy pronto.



DE TERRITORIO DE LLUVIA

(fragmento)



Alma sobrecargada de bondad,

alma sin necesidad de inmolarse.

Ahora muriendo por mí,

desde mi nombre turbio al desgaste de los días

en la boca del verano, preguntando por qué.

Alma dentro de mí y del egoísmo

de un Yo que escapa de los verbos,

que no se atreve a la soledad de los nombres.

Me alimento de nombres como tú de gotas pretéritas

parecidas al atardecer en Loughborough o

la lluvia en los balcones de un pequeño hotel en Montmartre.

Alma, interior de nube y claridad,

la culpa es de la esperanza, de lo oculto,

del ánimo inhospito del tiempo y del amor

¿Por qué el amor acerca cuerpos que no deben suceder?



domingo, julio 25, 2004

Ideas para satisfacer la necesidad de escribir

Después de reflexionar un poco sobre lo que ha pasado con el blog, me di cuenta de dos cosas. Por un lado estar en este viaje que se parece mucho a un escape del mundo en el epicentro de la tristeza, o lo que es lo mismo, un viaje muy lejos para llegar al centro de mí. El otro es que hace tiempo dejé de inventar en blog. Dejé de soñar con los futuros mensajes que iba a poner aquí. En realidad el estado turbio de mi ánimo (con esto me refiero al estado donde todo se agolpa para ser pensado, donde todo quiere encontrar una vía de escape para ser dicho) me ha obligado a escribir menos de lo que quisiera y al mismo tiempo entender más de la vida como concepto universal y de mi propia vida, todo esto mucho más de lo que quisiera. En fin que he dejado la ficción y he convertido este espacio en una suerte de diario de lo inmóvil. Está faltando ese Walking Around, esa sensación de andanza y plenitud al mismo tiempo pulcra y triste. He decidido por lo mismo hacer tres cosas. Escribiré esta página volviendo a su esencia de crónica de un viajero por la vida (no de un turistizante corredor de aeropuertos(aunque también)) abriré dos espacios más. Uno que se llamará El Reflejo de las Horas (inspirado por el diario de Kierkegaard) donde haré más bien una serie de reflexiones que se me van revelando con el tiempo, su único valor es poder canalizar este deseo de pensar que se piensa y conjugarlo con el se existe y se piensa, una suerte de puente entre el pensamiento abstracto y el existencialista más a la manera de un género literario que académico, daré nota de mis inventos y mis teorías (más ficción que realidad). Todo esto es pretencioso pero qué importa, la libertad de poder hacerlo es una decisión que me importa poco a donde pueda conducir. Se puede criticar de todos lados, pero lo que importa es que yo podré escribir cosas que me gustaría leer dentro de algunos años, una especie de cartografía de mi interior (sin comprometer, obvio, mi privacidad). Intentaré escribir continuamente, será normalmente corto.  El tercer espacio aún está por encontrar título y tendrá el espíritu de crear una suerte de novela por entregas, intentaré ser puntual en dar cada semana un capítulo. Para mí servirá de práctica y para relacionarme con los que afortunadamente acuden a leer Walking Around. De esta manera tendré ya tres canales para intentarme comunicar con ustedes y conmigo. ¿Será posible mantener tres espacios si con uno parece que por momentos he desaparecido de la tierra para siempre? Creo que sí pero será muy bueno probar mis fuerzas. De cualquier forma, la virtud del que hace esto es que tiene en mente escribir y escribir, cosa que por demás es un fin y no un medio. Espero contar con ustedes, lectores de nombres conocidos, lectores anónimos y espontáneos futuros lectores que encuentren en estas palabras algo intenso e interesante. Esperen pronto las noticias de la inauguración de estos espacios.



GRATITUD INFINITA



Hace un par de días, una persona, cuyo nombre me resulta lleno de trigo y selva, tuvo un gesto inesperado y ciertamente bondadoso. A mi llamada de auxilio económico, respondió con un correo electrónico y una noticia, pongo algo de lo que escribió: 



Te envíe unos grandes pesos, digo grandes, porque aunque no sea una cuantiosa cifra,

si son enormes por ir cargados con todo mi cariño...


 

He pensado en depositarte el pago por el sueño de conseguir un poema o unas letras toditas para mí, que aunque se que no tienen precio alcanzable, quiero que al menos con este intento por hoy logre ayudarte con esto, obvio que no para dedicarme un día completo de recuerdo, pero quizá si, un copa de vino, acompañado de quien gustes, pero que con la mente y con el corazón brindes por mi y por que te conocí... 

 

Con ese dinero pude comprarme una blusa, un maquillaje, cualquier banalidad, pero creo que no pude darle mejor uso, pues prefiero traer todo el día tus palabras y letras bien puestas y pegadas a mi piel. 



Y bien el depósito llegó, una cantidad cercana a los 50 dólares que en estas latitudes son un buen tanquecito de oxígeno y motivos. Quiero destacar lo más importante, el gesto, el hecho de creer en lo que escribo, una persona con quien comparto amistad en un plano y simbiosis en el plano de escritura-lectura. Gracias por este detalle. Un abrazo fuerte desde Mar del Plata. Mañana vuelvo a Buenos Aires. Ha sucedido mucho por acá. Pero hay cosas que puestas aquí parecieran quedarle debiendo a la realidad. Abrazos generales desde el Sur.



 



sábado, julio 17, 2004

Noticias del frente

Hace ya unos tres días terminé de leer  "La conjura de los necios" ese libro triste, absurdo y humorístico me llenó de una depresión parecida a la esperanza. Lo recomiendo ampliamente. Además el célebre Igantius Reilly, protagonista de la novela me recuerda mucho de mí pero también de varios amigos y familiares que a su manera luchan también contra cierto orden social de lo fútil comicamente. Me doy cuenta que en muchos sentidos soy lo que leo. Cuando leo empiezo a pensar a creer y a crear, por ejemplo ayer leìa tres biografías breves de filósofos, Spinoza, Kierkegaard y Wittengstein. De ahí surgieron cosas muy interesantes al interior en términos literarios y vitales. Ahora estoy en Mar del plata. He viajado poco por cuestiones económicas ya referidas anteriormente. Pero he viajado bien. Este lugar me gusta; salvo el frío a veces imposible. Además estuve en el casino. Me gusta el azar, el juego, la posibilidad de perder o ganarlo todo en un movimiento de la fortuna. Qué más da. Mis viajes son cosa rara. Puedo hablar de cierta inestabilidad de espacio. He manifestado desde temprano una cierta filiación con lo móvil. Ayer entre tantas ideas, varias de Kierkegaard fueron muy sugerentes. Hablar sobre el presente continuo, la suerte del seductor, lo que significan el flirteo y como su culminación arruina lo imposible. Una vez cosumado el acto, el seductor necesita dar la vuelta e irse hacia nuevas formas de lo anhelado. Hablaré más de esto porque es largo y tiene que ver con mi forma de vivir. Por eso los viajes y las historias tejidas de amor y tiempo en los años transcurridos. Ahora estoy trabajando en un poemario que comenzó en 1999 con el nombre de El fantasma Perpetuo y que de alguna manera es un largo poema de amor. Trabajo también sobre mi novela a ratos y sobre otro poemario al que llamo Duele una mujer en todo el cuerpo eso y más ideas, pequeños visos de lo que será un cortometraje del cuál me he enamorado. Al mismo tiempo el contacto con una familia de filósofos me ha hecho volver a soñar con publicar un libro filosófico social que contenga las obsesiones de mi vida, las múltiples preguntas que han atormentado o aligerado el paso de los días. Al mismo tiempo ahondar en la crisis económica me ha obligado a replantear el camino. Hay momentos en los que estoy dispuesto a dejar todo caer como un castillo de sueños que son naipes que son gotas de aire que son... pero otros me levanto con toda la fuerza y la iluminación del presente y la seguridad de que la mente es lo más parecido a las alas y al vuelo. Es de noche aquí, hace frío y una guitarra a lo lejos toca un jazz apenas sugerido. Es viernes. Las causas del mundo siguen pareciendo trozos de piedra inútil. Hay que pensar en toda la gente que duerme o despierta o ama a estas horas, hay que saludar a la gente de mi vida que de pronto en sueños consecutivos ha aparecido. Todo el mundo cabe en este sonar de teclas. Todo el mundo es hoy. Todo lo eterno comienza a parecer una putilla de rubor helado (a la manera de Muerte sin fin de Gorostiza) es Viernes y el mundo parece haberse terminado.  



lunes, julio 12, 2004

Pergamino irreprochable del error

Y aquí lleno de tantas crisis, lejos de la ilusión lumínica del tiempo pasado, todo parece eternecerse con la consigna del dolor. La vida se parece menos a un libro y más a una oscura traición de la vida. Todo esto va circulando en direcciones opuestas a la razón, a la lógica de la plenitud. El mundo agrietado corrompe las esperanzas de quienes creen, ilusos, que el día siguiente debe ser mejor que el anterior, simplemente porque está adelante y nuevo y porque ir hacia adelante (en esta ilusión del tiempo transcurriente) representa por motivos instrumentales el progreso, pero están equivocados, los diarios, las revistas, los libros, las pláticas que se escuchan en las calles sobrepobladas y grises, los vagabundos que duermen sobre sus cuerpos ajados, con las vestiduras rotas y suicias, el pepenador que ayer mientras yo salía de un restaurante brasileño, mendigaba migajas de las bolsas de basura y nos miraba como quien se comporta taciturno frente a un espejismo. El mundo real somos nosotros, decían sus ojos llenos de mugre y verdad. Las ciudades son como un virus que se reproduce por la esfera violada, los caminos zanjas por donde el progreso contamina con su falsa ilusión. Basta salir a la calle, poner un pie en las avenidas rotas, abrir los ojos y aceptar que algo ha salido mal. Yo, al menos, ya lo entiendo y lo asumo como una derrota no mía sino de algunos más ciegos que yo, hemos perdido, a nadie parece importarle ya el cinismo, no sé quién nos ha puesto vendas en los ojos, es un día donde todo parece tan claro y cínico y odioso. La vida es el otro y el otro parece estar mendigando palabras en la basura de las ciudades.

jueves, julio 08, 2004

Invitación y urgencia monetaria

Extra Extra, el poeta al que se le fundiò su màquina hace unos meses ahora se encuentra naufragando en Argentina pues se ha quedado sin dinero. Si algunos de sus lectores y amigos, amigas o parientes se apiadan favor de enviar su donaciòn a mi cuenta banamex que aparece en esta pàgina. Se los agradecerè. Como es de ràpido este post, convoco a quienes vivan en Argentina a la charla que darè en la Universidad Nacional de Lanùs sobre Zapatismo y la nueva democracia mexicana. Serà el profètico Martes 13 a las 18 horas locales. Espero verlas y verlos por ahì, un abrazo muy fuerte desde la 9 de Julio.



Gerardo Arturo

viernes, julio 02, 2004

Tanto silencio por ocurrir

Y por ejemplo las palomas aquí tardan más tiempo en darse cuenta de los peatones. También sucede que el metro circula en dirección contraria y las calles son largas y grises con árboles llenos de fantasmas y polvo. Hay luces de neón y mierda en las calles al mismo tiempo. Es un lugar fascinante. No he escrito mucho y sin embargo han sucedido tantas cosas. Como es costumbre la vida sucede más rápido que el tiempo. He leído también; comencé La conjura de los necios de John Kennedy Toole y ha resultado una maravilla. Yo no sé por qué desde que vi este libro supe que iba a cambiar mi manera de escribir, me daría algo así como la graduación para comenzar una novela que al fin pueda concluir. Descubrí tantas cosas en este universo interminable; Santa María de los Buenos Aires. Hoy iré al teatro. Aquí parece que el teatro es importante, hay cientos de teatros. Funciones con localidades agotadas. Hoy veré La señora Macbeth en el CCC. Un centro cultural establecido por el viejo partido comunista y que contrario a otras estructuras construidas con fondos similares en tantos países, esta tiene un aire de que la cultura es mucho más grande y perdurable que la política. (Divagación natural de la prisa, ruego no prestarle demasiado interés) Podría decir también: conocí el teatro colón y las paredes derruidas de la espalda de Sarandí(un barrio de tristeza máxima). Podría darles nombres y sucesos como: caminé por Araóz tratando de esquivar la mierda de tantos perros o comí un choripan en Retiro(la estación de autobuses). Podría decirles que estoy en un café Internet en una pequeña calle cuyo nombre no conozco justo a media cuadra de Corrientes donde pululan librerías y teatros y gente triste y alumbrada y encorvada como si en la espalda tuvieran una cicatriz de alas arrancadas. Podría decir todo esto y no significaría nada. Porque sucede que todo esto me sobrepasa, porque al interior hay un monstruoso retumbar de gloria oxidada, porque dentro de mí las ruinas se acumulan ahítas. Porque al mismo tiempo estoy radiante e inmóvil y cada día parece recomenzar mi vida y por la tarde sucede que es el mismo y es como estar atrapado en el tiempo y en la dulzura y la caída. Todo esto es Buenos Aires. Pero también más mucho más, mucho que respiro y no puedo escribir. Quiero saludarlos, a ustedes que visitan diariamente esta página, que dejan la huella de sus ojos, buscando estas letras que escribo con el corazón menguante. Les prometo escribir más a menudo (siempre digo eso y no lo cumplo) ustedes no dejen de escribirme, he recibido increíbles correos pidiéndome que escriba, eso a uno a veces lo saca de su silencio. Hoy termino, voy a tomar un café en El Foro, leeré este libro del que les hablaba y escribiré algunos poemas. Estoy feliz y umbroso. Alguien me dijo que yo era un ser contradictorio, y en días como este, eso es un gran alivio. Todas, todos, gracias de nuevo por leer. Escriban mucho.



...desde un rincón detrás del río de la plata

Gerardo Arturo